Rooibos (Aspalathus linearis)

Semillas de Rooibos (Aspalathus linearis)

El Rooibos, también conocido como té rooibos, es una planta originaria de Sudáfrica. Es apreciado por sus hojas aromáticas que se utilizan para preparar una infusión de té sin cafeína. Esta planta pertenece a la familia de las leguminosas y es conocida por su sabor terroso y dulce.

Cuidados de Rooibos:

1. Luz: El Rooibos prefiere la luz solar directa, pero también puede tolerar la sombra parcial.
2. Agua: Esta planta prefiere un suelo ligeramente ácido y bien drenado. Riégala regularmente para mantener el suelo húmedo, pero no empapado.
3. Temperatura: El Rooibos es resistente a condiciones climáticas adversas, pero prefiere temperaturas cálidas y no tolera las heladas.
4. Suelo: Prefiere un suelo ácido a neutro, con buen drenaje. Añade materia orgánica al suelo para mejorar su estructura y retención de humedad.
5. Fertilización: Fertiliza la planta con un fertilizante balanceado cada primavera para promover un crecimiento saludable.
6. Poda: Realiza podas regulares para mantener la forma y la salud de la planta. Elimina las ramas muertas o enfermas para fomentar un crecimiento vigoroso.

Germinación de semillas de Rooibos:

1. Recolección de semillas: Las semillas maduras de Rooibos se encuentran dentro de las vainas que aparecen después de la floración. Recolecta las vainas cuando estén maduras y secas.
2. Preparación de semillas: Remoja las semillas en agua tibia durante varias horas para ablandar la cubierta exterior y promover la germinación, incluso es recomendable lijarlas para aumentar la tasa de éxito
3. Siembra: Llena macetas con una mezcla de tierra bien drenada y coloca las semillas sobre la superficie. Cubre ligeramente con tierra y presiona suavemente.
4. Cuidado: Coloca las macetas en un lugar cálido y luminoso, pero evita la luz solar directa intensa. Mantén la tierra húmeda, pero no empapada.
5. Germinación: Las semillas de Rooibos pueden tardar varias semanas en germinar. Una vez que las plántulas hayan crecido lo suficiente, trasplántalas a macetas individuales.

Siguiendo estos cuidados y pasos de germinación, podrás disfrutar de tu propia planta de Rooibos y cosechar hojas frescas para preparar tu té casero.